Sino y Destino, de Daniel Guerrero, del colectivo Comala.

Con 14 cuadros con la técnica óleo sobre fibracel, el pintor Daniel Guerrero muestra en su trabajo una década de emociones y sus sentimientos más íntimos con la exposición Sino y Destino.

Durante la inauguración de esta obra pictórica en la Galería Abierta del Auditorio 2 del plantel Casa Libertad, el artista explicó a los asistentes la temática de la muestra en la que se mezclan sentimientos encontrados como amor, desamor, coraje, enojo, rebeldía y hasta espiritualidad.

Algunas de las pinturas en formato pequeño no tienen título y otras sí, como Foto estudio Ramírez, con el cual el artista recrea los antiguos estudios fotográficos, mientras que en Replanteado y reinterpretado, rememora las historias bíblicas de Judit y David (contra Goliat).

La muestra también exhibe el cuadro Portada psicodélica (trabajo en el que Guerrero se basó en las portadas de discos de los años 70), Amo odiarte, Réquiem por cada desamor superado, el cual es el único con la técnica óleo sobre tela y una de las piezas favoritas del artista, así como la Asunción de Enoch.

Los cuadros de Sino y Destino, al ser de formato pequeño, contienen micropinturas dentro de cada obra. La exposición estará abierta al público durante 15 días.

En charla con UACM Colectiva, Daniel Guerrero señaló que Sino y Destino es el título de uno de los cuadros y tiene que ver por un proceso de estancamiento emocional y anímicamente por el que atravesaba; “pintar me ayudó a salir como una olla de presión. Empecé a pintar todo de manera consciente o inconsciente. Cada cuadro está relacionado con un suceso en mi vida y al poner ‘Sino y Destino’ da a entender una cosa que tengo en este momento y que si no hago algo al respecto puede seguirme afectando, esa es la idea del título”.

Guerrero dijo que fue una forma de canalizar esas emociones, a manera de “arte terapia”. Los cuadros, añadió, tienen una temática en la que se mezclan distintos sentimientos que son encontrados y chocan entre sí, como el amor y desamor, enojo, coraje, rebeldía pero al mismo tiempo espiritualidad, “no es que se condensan o se unen entre ellos, es como poner en ese momento el instante en que ellos se encuentran y no se sabe si van a amoldarse o fundirse o van a hacer un corto circuito”, enfatizó.

Sobre el proceso creativo de esta obra, el pintor mencionó que inició desde la década pasada. “Réquiem por cada desamor superado es de 2002 y a ese tipo de cuadros cada año les voy poniendo una cosa, cada cuadro tiene la peculiaridad de que no están terminados realmente, pueden dar la apariencia de que están terminados, pero luego les voy poniendo otra cosa, es como una cebolla con unas capas interminables, tiene algo y hasta que no tiene fin no lo puedo dar por terminado”, por ello, dijo, en cada exposición los cuadros siempre tienen algo diferente, porque les agrega algo.

El artista dijo que pinta desde que terminó la preparatoria, en un principio como pasatiempo, como una alternativa y válvula de escape, pero de manera profesional y como una forma de obtener ingresos, lo hace desde hace diez años. Añadió que pertenece a Comala desde el año pasado, pero los integrantes de ese colectivo se conocen desde hace cuatro.

Guerrero invitó a la comunidad universitaria a conocer su trabajo, “no porque sean mis cuadros”, sino porque este tipo de espacios permiten que se difunda la cultura. “Que opinen, que se den una oportunidad de ver exposiciones, muestras, que vean cosas que difícilmente se van a dar, porque no en todos lados nos dan esa facilidad”.

En tanto, el maestro Rubén Galván –fundador del colectivo Comala– explicó que hace un año se consolidó este grupo y coincidió con el aniversario de la novela Pedro Páramo, de Juan Rulfo, por lo que de ahí retomaron el nombre Comala, “porque no queríamos hacer distinción de arte en disciplina, todas las artes están unidas en algún aspecto y no hay por qué hacer distinción entre una disciplina y otra, simplemente son géneros: literarios, pictóricos, escultóricos, mucho de esto del arte engloba música literatura, pintura, por eso fue que se tomó Comala para el colectivo”.

El también pintor invitó a la gente a que observe la muestra y conozcan la diversidad de la pintura, pues “no todo es figurativo, bodegones, paisaje o retrato, sino que hay una gran gama de técnicas y materiales en la pintura, escultura, en todos lados, y que se permitan conocer lo que estamos presentando”.

En tanto, Rogelio Estrada Pardo, enlace de la Coordinación de Difusión Cultural y Extensión Universitaria (CDCyEU) en este plantel, señaló que el colectivo Comala “nos han favorecido con sus exposiciones; nos invitan a tener cosas interesantes para nuestros propios estudiantes y abrazamos el proyecto Comala, desde la estructura de organización que ellos tienen: jóvenes pintores, dibujantes, grabadores, escultores, que vienen saliendo de las Fábricas de Artes y Oficios (FARO) y buscan los espacios para exponer su trabajo y se vaya reconociendo su arte”.

Agradeció al Colectivo Comala por apoyar a la CDCyEU, por el esfuerzo que realizan y aportan a las comunidades, pues de manera gratuita, ya impartieron un taller de pintura a niños de la Escuela Primaria Arturo Rosenblueth, con calidad en el trabajo, compromiso y responsabilidad con las comunidades.

Esta exposición fue inaugurada por el profesor Carlos Bravo, secretario técnico del Consejo del plantel Casa Libertad, así como por Rogelio Estrada Pardo.