Sexta Feria de la Salud en el plantel Cuautepec.
Se llevó a cabo la Sexta Feria de la Salud en el plantel Cuautepec, en el que profesores de la planta académica de la Licenciatura en Promoción de la Salud inauguraron el evento resaltando la importancia de dar tratamiento a temas de salud en un contexto postpandémico. Inauguraron el evento –el 15 de noviembre– el Mtro. Eduardo Delgado Fabián, Secretario Técnico del Consejo del Plantel, la Mtra. Yanet Yerena González, Directora del Centro de Integración Juvenil Gustavo A. Madero, la Mtra. Mayra Susana Carrillo Pérez, Coordinadora del Colegio de Ciencias y Humanidades y la Mtra. Verónica García Portillo; en esta oportunidad tratará sobre la salud integral, física, emocional, mental y psicológica.
En la primera mesa se presentó una conferencia sobre el manejo de emociones y estrés impartida por la profesora-investigadora Aurora Marcela Canabal Pulido, quien resaltó que la función de las emociones es adaptarnos a nuestro medio, lo cual es clave para la supervivencia. Comentó que con el caso de la pandemia, la angustia, el miedo y diferentes emociones, permearon en la sociedad y las personas tuvieron que lidiar con su propia situación. Para entender mejor, Canabal destacó que las emociones de dividen en sanas e insanas; las primeras permiten al sujeto avanzar, alcanzar metas, resolver situaciones, mientras que las segundas, reprimen, dañan, detienen al sujeto. La ansiedad y el pánico, en este sentido, es la parte no sana de emociones como inquietud y miedo, que en cierto límite, son sanas mientras no se presenten en un lapso largo o de manera consecutiva.
Ejemplificó las diferencias de estas características con una situación de separación de pareja, en la que el pensamiento del sujeto es que la relación se puede recuperar, su emoción es de preocupación e inquietud (emociones sanas) y la conducta lo lleva a buscar ayuda profesional. En contraparte, si el pensamiento invasivo es que perdió a su pareja para siempre, puede derivar en ansiedad y pánico (emociones insanas), teniendo así como conducta, acciones suicidas. Comentó que más emociones desbordadas, no reguladas, llevan al sujeto a perderse a sí mismo. Luego resaltó la diferencia de controlar y regular las emociones. El controlar las emociones es tratar de no sentir esa emoción, de ocultarlas, pero lo único que eso deriva es que en algún momento las emociones, al estar suprimidas "exploten". Por otro lado, regular las emociones trata de que éstas siempre se externen de manera oportuna.
Posteriormente, la profesora invitó a seis estudiantes a realizar una actividad en la que, con un globo en representación de las emociones, invitó a pensar sobre la regulación/control de ellas. Por último, como responsable del programa de derivación de apoyo emocional al estudiante en “Tejedoras de redes para la Salud”, platicó que el objetivo de este programa es ayudar al estudiante a que desarrolle su potencial y habilidades, conocerse, crecer y ser la mejor versión de cada uno.
Luego de la conferencia, la segunda mesa de la Sexta Feria de la Salud la condujo la Psic. María Consuelo González Vargas, quien impartió un pequeño Taller sobre Resiliencia. La especialista comenzó realizando una actividad en la que invitó a los asistentes a asociar la resiliencia con una palabra que viniera a su mente; “valentía”, “resistir”, “superación”, “entendimiento”, “proteger”, “confianza”, y “lucha”, fueron las palabras que figuraron en el pizarrón de acuerdo a lo que las y los uacemitas conciben en torno a la palabra inicial.
"Tenemos que entender que la vida nos va a presentar situaciones que son como son y no como queremos que sean. Por ello, el entendimiento y la aceptación son puntos claves en este proceso", señaló. Además, consideró que la confianza también es uno de los pilares de la ‘resiliencia’, pues poner nuestra confianza en algo en lo que se cree puede ayudar a que la persona encuentre un refugio y motivo para continuar; la confianza en sí mismo es de suma importancia, por supuesto, pues mientras la persona siga teniendo convicción y confianza en lograr sus objetivos, y continuar, su avance estará seguro.
Como otra característica que la psicóloga apuntó como pilar para la ‘resiliencia’, es la pausa que, según platicó, es de utilidad para poder digerir procesos, para tomar un descanso, reflexionar sobre nuestra realidad y dar importancia a otras cosas fuera de aquello que puede ser abrumador. Por otro lado, destacó que la idea de la inmediatez –muy presente en nuestra sociedad actual– nos puede llevar a impulsos, emociones extremas, intolerancia, frustración, entre otras, así como a acciones no sanas para quien las siente e incluso a veces para quienes la rodean, pues desencadena incluso en actos de violencia.
La especialista invitó a estudiantes a pasar al frente del aula para realizar un ejercicio en el que estudiantes hacían la prueba irse de espaldas hacia un compañero para que éste los sostuviera, intentando hacer referencia a cómo se sienten las personas ante situaciones en las que no saben qué pasará; en este caso, no tenían certeza de que sus compañeros los atraparían. Debe considerarse analizar los recursos, el autoconocimiento e identificar aquello por lo que ya se ha pasado, pues pueden ser puntos de ayuda en situaciones emergencia, destacó la profesora ante este ejercicio de confianza.
Así, la ponente realizó otros dos ejercicios en los que evidenció la importancia de la ayuda de quienes están alrededor de la personas, así como la relevancia del contexto en el que se encuentra, pues también puede influir en su avance emocional, consideró.