Sexta Feria de la Salud en el plantel Cuautepec.

En el marco del segundo día de actividades de la Sexta Feria de la Salud en el plantel Cuautepec, se llevó a cabo el Taller de duelo, impartido por la Psic. Alejandrina González García, quien aportó al conocimiento de los uacemitas sobre las etapas de un duelo. Éste puede presentarse en distintas situaciones en las que las personas viven alguna situación de impacto en sus vidas de manera desfavorable, al desprenderse de alguna persona, tales como un rompimiento de pareja o la muerte de algún ser querido; para dar tratamiento a estas situaciones, es importante acudir un especialista en el tema que pueda guiar las emociones del doliente ayudándolo a llegar a la etapa de superación. Algunas de las fases del duelo son: la ‘incredulidad’, que nos prepara para soportar el impacto emocional, seguida de la etapa de darse ‘cuenta de la pérdida’, y posteriormente la etapa de ‘aceptación y adaptación’, en la que la ponente señaló que aún se siente la ausencia en lo cotidiano.

El duelo consta de distintas etapas, aunque cada personas las vive de diferente manera; la especialista resaltó que la negación es frecuente entre las personas al recibir alguna noticia que no les es grata: “como cuando a una madre le dicen que su hijo es adicto a las drogas y ella se niega a aceptar esa situación porque no es lo que ella quisiera que fuera verdad; de ahí pasa a la negociación, que es otra de las etapas de esta situación, es un acto en el que el doliente trata de hacer una clase de intercambio con un ente superior a cambio de que el dolor no siga figurando en su ser, por ejemplo, cuando las personas le piden a Dios -cualsea el dios o entidad en el que la persona crea- que les quite ese pesar y a cambio ellos se comprometen a orar diariamente o hacer obras de caridad, o acudir al templo.

La depresión deviene, añadió, de la falta de aceptación ante el duelo; la situación de la pandemia agudizó esa situación debido a que en el caso de las muertes, una vez que el paciente enfermos de COVID-19 ingresaba a las instalaciones hospitalarias, difícilmente podrían volverlo a ver, pues la mayoría de los pacientes murieron a causa de la enfermedad y entregaban los cuerpos ya en cenizas; de igual forma, el apoyo del círculo familiar fue muy limitado porque las personas no podían estar en contacto físico y, por ende, la familia directa del fallecido, lidiaba con su dolor sin algún apoyo moral externo.

Por supuesto, estas situaciones no se limitan sólo a los decesos por la pandemia, la pérdida de seres queridos provoca siempre una caída emocional en la que contar con apoyo moral es lo más deseable, sin embargo, Alejandrina destacó que la conexión a un doliente debe empezar por preguntar si podemos estar a su lado y qué es lo que necesita. Además, es válido que no se acepte por parte del doliente este tipo de ayuda porque debemos comprender que los procesos de duelo son diferentes para cada persona. El apoyo debe ser de acompañamiento, comprensión y respeto, consideró.

Alejandrina indicó que es importante hablar sobre la muerte, pues es una situación innegable que, si se habla, puede contribuir a la asimilación, además de auxiliar en la acción ante esta inminente situación, pues no solo es una situación emocional, sino que acarrea cosas legales, económicas, entre otras, y la familia debe estar al tanto de cómo gestionar esos aspectos igual de relevante ante un caso de fallecimiento.

Por último, indicó que los problemas de sueño, problemas para poder interactuar con otras personas, problemas de irá o sentimiento de que la tristeza y dolor no dejan al doliente avanzar y la persona solo quiere estar aislado y llorar, son algunas de las características de que lo más conveniente es acudir a terapia para poder superar. "No va a dejar de doler, pero no va a doler de la misma manera. Cuando ya no te deja avanzar, es momento de ir a terapia”.

Durante la segunda mesa, realizada el 16 de noviembre en la Feria de la Salud en el plantel Cuautepec, se presentó el “Taller de Risaterapia y las emociones en mí”, impartido por Armando Samuel López Madrazo, Master en Desarrollo personal, quien compartió con los uacemitas algunas técnicas para liberar estrés emocional por medio del movimiento del cuerpo; además señaló que con frecuencia las dolencias reflejan alguna situación emocional reprimida, que puede ser canalizada por medio de actividades positivas como la risa, que contribuye a sanar emociones, dijo.

El tallerista comentó que el miedo es el sentimiento que con frecuencia desencadena actuares insanos, pero que al ser consciente de él, puede ser transformado. Para ello, invitó a todos los asistentes a realizar una serie de actividades en pareja en las que ayudó a repensar la importancia del agradecimiento por las personas y cosas que figuran en nuestras vidas. Así también contribuyó por medio del juego a que las y los estudiantes buscaran un estado de relajación y felicidad.

Para dar cierre, invitó a realizar un último ejercicio en el que llamó a los asistentes a que dejaran de verse a sí mismos como víctimas ante las adversidades que enfrentan y agradecer incluso esas malas situaciones para pasar a una etapa de perdón/transformación. “La mente reacciona a lo que nosotros le estamos pidiendo”, destacó. Guio al público a visualizar las situaciones que querían superar y les invitó a compartir su sentir con el grupo.